Por Christopher Feliciano – Consultor Estratégico y CEO de Dream Group Management LLC

Prepararse para un financiamiento —ya sea bancario, privado o con inversionistas— no es un proceso improvisado. Requiere método, claridad, estructura y una narrativa empresarial que tenga sentido.La realidad es simple: Los números importan… pero los números sin contexto pueden hundir tu solicitud.
He visto emprendedores con buen producto, buena intención y buen potencial perder oportunidades solo porque no estaban preparados. También he visto empresas establecidas que podían crecer, estancarse por no tener orden interno.La diferencia entre un “sí” y un “no” casi nunca es suerte: Es preparación.

El financiamiento no comienza con el préstamo ni con el inversionista.
Comienza contigo.
Muchos empresarios buscan financiamiento porque “necesitan capital”, pero no saben realmente para qué. (Les aseguro que la cantidad de emprendedores y empresarios que se comunican no tienen un desglose, quieren el dinero primero y luego ver que tal...)
Los inversionistas buscan estabilidad, no improvisación.
Evalúan:
Si tu negocio depende 100% de ti para funcionar, eso no es una operación: es un riesgo.
Si no puedes explicar hacia dónde vas, ¿por qué alguien pondría dinero en ti?

Aquí fallan el 80% de los empresarios que me contactan inicialmente.
Necesitas:
Sí importa.
Los inversionistas verifican tu presencia, consistencia, marca y credibilidad. Y no solo la del proyecto o negocio sino las personales y profesionales.
Aquí van los más frecuentes… y los más costosos:

Si usted no está claro de lo que quieres, lo que ofreces y lo que necesitas: no debes aplicar o buscar una inversión o financiamiento, debes buscar ayuda experta que te ayude a organizarte.
Números inflados, incompletos o mal explicados son un semáforo rojo.
Los números hablan, pero tú decides si cuentan una buena historia o una alarma financiera. Y quiero que te detengas acá, si, porque los empresarios deben conocer su negocio mucho mas incluso que sus asesores, si un empresario hace las compras pero no sabe lo que esto representa en ganancia bruta o neta, tenemos un asunto que antender. En algunos casos, los emprendedores y empresarios, no se toman tan enserio los numeros, creen que "un mas o menos"es lo correcto y ese es el inicio de una mala y desafortunada administración y potencial denegación.
Ir a una cita con un lender o inversionista con:
La primera impresión no se recupera.

Esto incluye:
Tu identidad visual, mensajes, website y contenido deben comunicar profesionalismo.
No se trata solo de números, sino del contexto:
Un negocio desorganizado siempre parece más riesgoso de lo que realmente es. He visto negocios poco organizados con un potencial increible.
No todos los empresarios están listos para dinero externo.
Y eso está bien.
La preparación adecuada puede tomar semanas o meses.

Pero también existe esta otra verdad:
Con la preparación correcta, puedes conseguir capital que hoy parece imposible.
Y en la mayoría de los casos, lo único que falta es alguien que estructure tu proyecto profesionalmente, alquien que comprenda el proyecto y que pueda auxiliarte sin quitarte la responsabilidad y el deber.
Ahí es donde entro yo con sobre 10 años de experiencia ayudando a cientos de negocios tanto en inversión privada como en financiamiento comercial convencional. En Puerto Rico o los Estados Unidos, cada caso es diferente y por eso cada caso merece ser evaluado, cotizado y medido de forma individual. Solo trabajo con quienes de verdad están dispuestos a lograr sus objetivos.

Yo ayudo a empresarios a:
Un proyecto bien preparado inspira confianza. Uno improvisado espanta capital.
Si quieres prepararte para tu próximo paso —ya sea expansión, inversión o financiamiento— puedes escribirme o comunicarte directamente. Si tengo agenda disponible con gusto podré ayudarte a lograrlo.
Porque una idea sin estructura es solo un sueño… pero un proyecto preparado estratégicamente se convierte en oportunidad.

¿TE FUNCIONA?